La agitación en el sistema financiero provocada por la quiebra de Silicon Valley Bank tiene a mucha gente sintiéndose un poco inquieta sobre dónde tienen aparcado su dinero. Se preguntan si sus bancos podrían seguir el camino de SVB o Signature Bank, con sede en Nueva York, que los reguladores también acaban de cerrar. Eso ha provocado que algunos consumidores lleven sus depósitos a los grandes bancos: los JPMorgan del mundo, que se consideran demasiado grandes para quebrar y están más estrictamente regulados.
